Los permisos habían sido rechazados con anterioridad a la empresa española.
Ciudad de México.- La Comisión Reguladora de Energía (CRE) otorgó la aprobación de permisos para 15 plantas de Iberdrola, las cuales habían enfrentado negativas previas antes de su venta. Estas plantas, todas propiedad de Iberdrola México, se dedican a la generación de energía bajo las modalidades de autoabastecimiento y cogeneración.
La aprobación incluye las plantas que habían sido previamente vendidas a un fideicomiso privado con participación gubernamental en el transcurso de este año. Durante una sesión extraordinaria llevada a cabo recientemente, la CRE autorizó la modificación de las condiciones de aprovechamiento de la energía eléctrica generada por estas 15 centrales, las cuales son:
- Iberdrola Energía Monterrey
- Parques Ecológicos de México
- Iberdrola Energía La Laguna
- Iberdrola Energía Tamazunchale
- Iberdrola Energía Monterrey, Central Dulces Nombres II
- PIER Quecholac Felipe Ángeles
- Eólica Dos Arbolitos
- Parque Industrial de Energía Renovable
- PIER IV
- Iberdrola Energía del Golfo
- Iberdrola Energía Altamira
- EnerTek
- Iberdrola Cogeneración Ramos
- Iberdrola Cogeneración Altamira
- Iberdrola Cogeneración Bajío
Es relevante recordar que en junio de este año, el gobierno de México y el fondo privado Mexico Infrastructure Partners (MIP) firmaron un acuerdo para adquirir la mayoría de las acciones de 13 plantas, principalmente de ciclo combinado, de la filial mexicana de Iberdrola. Este acuerdo sirvió para resolver diversas controversias que habían surgido entre la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador y Iberdrola México.
En consecuencia, la CRE liberó los permisos de generación que habían permanecido suspendidos para algunas de las plantas, y se logró resolver conflictos relacionados con las centrales de autoabastecimiento, incluyendo la Central de Autoabastecimiento Dulces Nombres de Iberdrola Energía Monterrey.
Adicionalmente, se confirmó la suspensión definitiva de una multa de 9.1 millones de pesos que previamente se había impuesto a Iberdrola Energía Monterrey por la supuesta venta de electricidad a empresas cuyos nombres no estaban incluidos en su permiso de autoabastecimiento.