La inflación de estos materiales se ubicó por encima del INPC de 5.06 por ciento en junio, de acuerdo con el INEGI.
Cristian Téllez | El Sol de México.- La inflación no ha terminado y sigue presionando los bolsillos de las familias mexicanas, pues ahora deberán enfrentar el regreso a clases con aumentos en los precios de los útiles escolares.
De acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) de la educación se ubicó en 4.85 por ciento a tasa anual en junio, su mayor nivel para un mismo periodo desde el 2019. Esta cifra está por debajo de la inflación general del país que en el sexto mes del año se ubicó en 5.06 por ciento anual, su tasa más baja desde marzo de 2021.
“El problema no es el comportamiento de la inflación en los últimos meses, en lo que se ha reducido el ritmo de crecimiento, sino el aumento que ya está incorporado en estos momentos en los precios de los productos”, consideró Miguel González, coordinador del Centro de Estudios Financieros y de Finanzas Públicas (CEFI) de la UNAM.
Agregó que será difícil para las familias enfrentar los gastos escolares, aunque por los tiempos preelectorales es posible que existan apoyos gubernamentales.
“Los apoyos gubernamentales seguro serán para escuelas públicas, aunque van a aumentar las cuotas que les piden a los padres de familia. Por su parte, las colegiaturas privadas es probable que aumenten más que el índice general”, explicó.
Si bien la inflación general del país ha desacelerado, todos los productos de la lista escolar superan este nivel, lo que sin duda presionará más las finanzas de los hogares con el regreso de millones de estudiantes el próximo 28 de agosto.
Los cuadernos y carpetas se encuentran entre los productos que más se han encarecido; en junio de 2019, antes de la pandemia, mostraba una inflación de 7.18 por ciento anual y ahora se ubica en 13.30 por ciento para la misma fecha en 2023.
En este mismo sentido, el material escolar como plumas, lápices y otros, se han incrementado de 4.10 por ciento en junio del 2019 a 6.40 por ciento en el 2023.
Para Alain Jaimes, analista senior en Signum Research, la lucha contra la inflación no ha terminado, si bien la desinflación registrada recientemente es buena señal, se debe en gran medida al descenso de la inflación importada. Mientras tanto, las presiones inflacionarias al interior aún siguen vigentes, tal como lo deja ver el elemento subyacente de la inflación.
Respecto al impacto de los hogares mediante el rubro educativo, el analista prevé que sigan los impactos negativos en el bienestar de la población, aunque este aumento inflacionario no sería tan grave como el de las mercancías.
“Hacia adelante, aunque se sigue estimando que la inflación continúe descendiendo, el rubro de educación se pronostica en niveles superiores a cuatro por ciento, es decir, una desaceleración respecto a la actual, aunque acotada. Por ello, continuaría siendo una presión adicional hacia los hogares y su gasto”, aseveró.
La Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec) estima que los padres de familia gastarán alrededor de siete mil 200 pesos, es decir, un incremento de 30 por ciento mayor que el año anterior, debido al aumento en los costos de producción y distribución de los productos.
La Anpec afirmó que la lista de útiles escolares costará al menos mil 600 pesos; los zapatos y tenis mil 200; los uniformes mil 900, y la mochila 500, dando un gasto total mínimo de cinco mil 200. Además, las aportaciones voluntarias y los gastos agregados por cada escuela que llegan a implicar mínimamente dos mil más, con lo que ascenderán a siete mil 200 pesos.
Con información de El Sol de México.