La caída en el valor del peso mexicano significa que los compradores mexicanos tendrán menos poder adquisitivo para bienes en Estados Unidos.
McAllen, Texas.– El valor del peso mexicano cayó el martes después de que el presidente electo Donald Trump anunciara su plan de aranceles.
Actualmente, $1 dólar puede cambiarse por 20 pesos mexicanos, en comparación con los 16.5 pesos en junio pasado y aproximadamente 18 pesos la semana pasada.
La caída en el valor significa que los compradores mexicanos tendrán menos poder adquisitivo para bienes en Estados Unidos.
Kevin Peek, profesor de Economía en South Texas College, explicó que el valor del peso mexicano ha estado cayendo gradualmente.
“Podría detonar una recesión de la que sería difícil recuperarse”, dijo Peek.
La caída abrupta tras el anuncio del Sr. Trump podría afectar a los negocios del Valle del Río Grande e incluso a la moneda estadounidense si México toma represalias.
Los aranceles ‘no son una preocupación importante’ aún para los negocios del Valle.
“Si México impusiera los mismos aranceles, veríamos una depreciación del dólar, lo que reduciría el poder adquisitivo de los estadounidenses cuando viajan a México”, comentó Peek. “Si México impusiera aranceles similares, habría turbulencias económicas, particularmente en nuestra región”.
Algunos compradores mexicanos ya están sintiendo los efectos de la caída del peso.
Felipe Quezada, un comprador de Reynosa, es uno de los afectados.
“Mucha gente que viene de México a Estados Unidos tiene que gastar más y ajustarse”, dijo Quezada. “No se puede hacer mucho porque los salarios son bajos”.
Peek advirtió que la economía estadounidense en general sufriría si México o Canadá decidieran imponer sus propios aranceles, y cree que el Valle del Río Grande podría quedar atrapado en medio de problemas económicos.
“Si continuáramos adelante con los aranceles, es muy probable que la depreciación solo continuaría, lo que llevaría a una reducción constante en la demanda de bienes y servicios en nuestra área. Y sabemos lo que eso significa: desempleo, salarios más bajos y más dificultades para llegar a fin de mes”, señaló Peek.
Peek agregó que estos problemas no solo afectan la frontera; el dólar canadiense también está perdiendo valor.