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“El Pingüino” ya estrenó un memorable primer capitulo en la plataforma MAX y promete no defraudarnos este domingo con la segunda entrega.
Especial.- Claro, la infame ciudad del único e inigualable Batman siempre ha sido retratada en cómics, películas y televisión como un lugar corrupto, lleno de crimen, con unos pocos rascacielos de fondo. Los policías son corruptos, los políticos también, e incluso los criminales son demasiado malvados para los otros criminales. Esta es la ciudad que el Joker de Heath Ledger en “El Caballero de la Noche” solo quería ver arder.
Esta Gotham está llena de los mismos malos, crímenes violentos y falta de luz solar (en serio, siempre está nublado en Gotham), pero esta vez no hay esperanza. Quizás sea porque no hay héroe: ni Batman, ni efectos especiales, ni batallas entre el bien y el mal. Solo Tony Soprano en Ciudad Gótica. O más bien, Colin Farrell como el villano titular con varias capas de maquillaje protésico, tratando de obtener ganancias y poder en medio del caos. Es fascinante, aunque profundamente deprimente, de ver.
Farrell retoma el papel que no podías creer que interpretó en “The Batman” de 2022 junto a Robert Pattinson y Zoe Kravitz.
La serie tiene lugar tras la explosión del dique al final de la película (cometida por el Acertijo de Paul Dano). La ciudad está en desorden y la muerte del jefe criminal Carmine Falcone (John Turturro) ha dejado un vacío de poder.
Después de que el Pingüino (también conocido como Oswald Cobblepot, u Oz Cobb, no está del todo claro) comete un crimen impulsivo en los primeros minutos del estreno, se ve obligado a seguir un nuevo y peligroso camino para mantenerse con vida en el complicado submundo criminal de la ciudad. La historia de Oz no es limpia ni bonita; roba, engaña y mata sin escrúpulos. No le importa a quién pisa ni cuán fuerte. Solo le importa estar vivo al final de otro día.
Los fanáticos de Batman reconocerán nombres de los cómics y otras series y películas.
La familia mafiosa Falcone es prominente, incluso sin Carmine, con la hija psicópata Sofia Falcone (Cristin Milioti, una revelación) tomando un papel principal. Hay otros mafiosos y criminales en el mundo del Pingüino, desde el resbaladizo Johnny Vitti (Michael Kelly) hasta el nuevo recluta de Oz, Victor Aguilar (Rhenzy Feliz).
Si no reconoces a nadie, está bien. “Penguin” crea sabiamente una historia que no requiere conocimiento detallado de la mitología de Batman ni de la película de 2022 para entenderla y apreciarla.
“Penguin” es, más o menos, un programa de crimen que casualmente tiene algunos villanos de Batman.
Está bien pensado por los productores, incluidos Matt Reeves, director de “The Batman,” el propio Farrell y Lauren LeFranc (“Agents of S.H.I.E.L.D.”). Pero el éxito del programa depende completamente de la actuación de Farrell, que es tan impactante y perturbadora (en el buen sentido) como lo fue en la película.
Hay algunas transformaciones en pantalla que son impresionantes, y luego está lo que el departamento de maquillaje ha hecho con Farrell, que es irreconocible. Pero, a pesar de una gruesa capa de silicona y quién sabe qué más en su rostro, el actor nunca deja que nada interfiera en su interpretación fría e inquietante del personaje.
Sofia es una asesina perturbada que ha sido liberada de Arkham Asylum y es rechazada por su propia familia debido a sus maneras impulsivas. Los grandes ojos de Milioti, que le han ayudado a interpretar personajes adorables en el pasado, son ahora ventanas a un alma demoníaca, utilizados de formas desconcertantes y aterradoras. Encuentra en Oz un aliado o un enemigo, o ambos. De cualquier manera, los dos actores son exquisitos en sus escenas compartidas, que son la mejor parte de la serie.
“Penguin” es en muchos momentos demasiado sombrío y oscuro. Aunque no lo esperábamos tiene tintes de comedia, juega con esa línea delgada entre contar historias macabras de forma convincente y tramas tan deprimentes (y a veces aburridas) que te dan ganas de apagar la TV.
“Penguin” promete cruzar esa línea de un lado a otro durante los ocho episodios de la temporada.
