Tras la reinstauración de la política de Titulo 8, la inmigración indocumentada en la frontera sureste con México ha disminuido casi en un setenta por ciento.
Austin, Texas.- Después de que la Suprema Corte de Justicia señalara que Texas y Luisiana no pueden demandar a la administración Biden sobre como aplicar las leyes de inmigración, el gobernador texano, Greg Abbott, catálogó como “indignante” al veredicto del supremo tribunal.
Los gobiernos de Texas y Luisiana querían que los magistrados les dieran la razón sobre quienes deberían ser deportados si cruzan ilegalmente la frontera sureste, y argüían que el presidente Biden “no estaba aplicando el criterio correcto”, pero los jueces desecharon la demanda por 8 votos contra 1.
El mandatario texano dijo en su cuenta de twitter que; “Texas continuará utilizando a elementos de la Guardia Nacional y a personal de la policía estatal para vigilar su frontera sur, y así combatir la inmigración indocumentada”.
La decisión de la SCJN refuerza el marco jurídico federal en el sentido de que; Solo la administración Biden puede ejecutar la aplicación de las políticas migratorias, incluyendo quienes pueden obtener asilo humanitario y quienes pueden ser rechazados. esto por representar una amenaza a la seguridad nacional o por tener antecedentes criminales.
Texas y Luisiana querían que el criterio de expulsión se extendiera a otros grupos de inmigrantes indocumentados, esto arguyendo que representan mayores “costos económicos” para los estados que tienen que lidiar con el cruce masivo de personas sin documentos de estancia legal.
De acuerdo al último reporte de la Patrulla Fronteriza tras la reinstauración de la política de Titulo 8, la inmigración indocumentada en la frontera sureste con México, ha disminuido casi en un setenta por ciento.